jueves, 4 de julio de 2013

De la importancia de la inteligencia sobre el conocimiento

“Es más importante saber cómo pensar qué saber que pensar” – Esta es una frase dicha por muchísimas personas, ya sea en el ámbito literario o científico. No es literalmente escrita así (al grano y cruda), tiende a ser más adornada con palabras que rodean el contexto que usa el autor, pero para este caso me sirve así de cruda y sin adornos.

“¿Qué quiere decir esa frase?” ¿Alguna vez se han hecho esa pregunta? De cual es la diferencia entre inteligencia y conocimiento. Pues estas palabras son escritas en nuestro diccionario desde que somos pequeños y la mayoría del tiempo no se hace énfasis en resaltar la linea que diferencia ambas palabras. Para empezar, conocer las palabras entra en el área del conocimiento. Aprender su significado por lógica, razonamiento, o simple deducción entra en el area de la inteligencia.

- No, no digo que deducir el significado de una palabra te haga inteligente, solo que entra en su área, más nada. Sigan leyendo. -

Déjenme ampliar un poco lo anterior. Así como se escribe, claramente se puede suponer con bastante certeza que “conocimiento” viene de “conocer”. En cambio, “inteligencia” viene del latín intellegentĭa, y tal cual les dejé deducir más arriba, “es la capacidad de entender, asimilar, elaborar información y utilizarla para resolver problemas” (Wikipedia).

Pero eso no termina de explicar cual sería la diferencia entre conocimiento e inteligencia, así que trataré de crear una idea general y personal acerca del significado y diferencia entre ambos términos:

Conocimiento es saber como resolver un problema.
Inteligencia es deducir como resolver el problema
.

Esa idea es muy general, y posiblemente se pueda prestar para cierta mal interpretación, pero la dejaré así y procederé a seguir con el tema. Pero antes, dejenme aclarar algo:

El conocimiento no garantiza la inteligencia.
La inteligencia nos deja conocimiento.

Lo que quiero decir con esto último es que no solo por saber que “2+2=4” significa que sabré el porque de ese resultado, y mucho menos el resultado de cualquiera otra suma. El problema es no saber usar ese conocimiento; muchos maestros y padres prefieren enseñarles a sus hijos qué pensar en vez de cómo pensar. Esto resulta en una especie de adoctrinamiento en el que el joven aprende y aplica este conocimiento sin saber de donde viene, cuales son sus consecuencias, si hay otras alternativas, o siquiera si son ciertas estas afirmaciones.

Ahora, al saber cómo pensar no es necesario que nos “bañen” en todo el conocimiento existente. Si se posée previo conocimiento del valor de los números y el orden en el que se encuentran alineados, unas 6 sumas de la tabla del 2 serían suficiente para deducir el valor del resto de las 8 tablas (ignoro el 0).

- Uso la suma como un ejemplo básico para un niño de kinder (cuando yo aprendí a sumar) ya que es la edad perfécta para enseñar a alguien a como pensar. -

Volviendo al tema: “el conocimiento no garantiza la inteligencia pero la inteligencia si garantiza conocimiento”. Con esto quiero decir que si no se sabe usar, o más bien aplicar, el conocimiento que poséemos de una manera conjunta, no podemos desarrollar un buen nivel de inteligencia.

Claro, la inteligencia no trabaja por si sola, necesita diréctamente del conocimiento, ya sea previa o posteriormente a la resolución del problema. Cuando se aplica previamente podemos asumir dos resultados: fallo o éxito. Lo cual conlleva a una posterior absorción de conocimiento (resultó = manera correcta. No resultó = manera incorrecta) que nos ayudará a, en un futuro, optimizar el tren de pensamiento que nos llevó a ese resultado, sea malo o bueno.

Pero eso es mucha habladuría, lo que quiero decir es que para poder deducir cualquier cosa, CUALQUIER COSA, es necesario un previo conocimiento. Ya sea algo que aprendimos por accidente o algo de lo que no tuvimos que hacer una deducción, no puede haber inteligencia sin conocimiento. Así como los animales aprenden trucos basados en experiencias, lo mismo podemos lograr nosotros (al final, también somos animales): aprender cosas por experiencia en vez de que se nos enseñe.

Ahora la frase que usamos al principio toma otro significado:

Conocimiento = saber de como resolver un problema.
Inteligencia = saber aplicar el conocimiento.

Inteligencia = saber aplicar el saber de como resolver un problema.

- La matemática es algo bello y hermoso, ¿no créen? -

Ahora, el conocimiento es el qué, la inteligencia es el cómo. Son mutuamente dependientes, y el saberlas usar juntas es una de las grandes habilidades que poséemos como seres humanos, así que debemos aprovechar estos dones en todo lo posible.

Por último, ¿por qué la inteligencia es más importante que el conocimiento?.

Supongo que es una opinión más personal que 100% confirmada, dependerá del ojo del que mire. Dejenme usar otra metáfora (adoro las metáforas): conocimiento sería saber dónde están úbicados los puntos que nos revelarán la imagen oculta, la inteligencia es la que nos dirá como unirlos y obtenerla.

Claro, saber dónde están es muy importante, pero si no sabemos que hacer con ellos, saber o no de su existenca es totalmente irrelevante. En cambio, con inteligencia, de alguna manera u otra, encontraremos los mismos puntos y los deduciremos. Por eso prefiero la inteligencia sobre el conocimiento/saber.

Sean buenos.

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PS: Sé que disvarío mucho, es debido a un ligero trastorno de deficit de atención. Pero mi idea general está ahí. Si no están de acuerdo con alguna de mis opiniones o análisis, por favor comenten y deduciremos que hacer al respecto.

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